El caso de los estudiantes mexicanos masacrados destapó otros cientos: afirman que fueron 500 los cuerpos que se encontraron en solo dos años. La guerra narco en el sur y el oeste del país no tiene fin.
Diferentes organizaciones civiles, principalmente, la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (Upoeg), denunciaron que en el lapso de dos años se encontraron alrededor de 500 cuerpos en el estado de Guerrero.
Este no es el único estado en el que sistemáticamente hay desapariciones, asesinatos, mutilaciones y todo tipo de vejaciones, sino que Michoacán (conocido como 'Tierra Caliente') o Sinaloa, por ejemplo, son otros violentos estados donde se vive en constante conmoción social por el crimen organizado.
Al igual que lo afirmó Bruno Plácido, dirigente de la Upoeg, el caso de los 43 estudiantes desaparecidos, cuyos cuerpos fueron posteriormente encontrados en una fosa común, dio a conocer al mundo la dura situación que se vive en ciertos estados de México.
La directora de Ciencia Forense Ciudadana, Julia Alonso Iguala, estimó que podría haber otras 40 o 50 fosas con cuerpos y demandó a las autoridades a apresurar los trabajos de búsqueda en la zona.
La violencia, el crimen organizado, las fosas con cuerpos, las imágenes de cadáveres colgados en la entrada de algunos barrios de los más sangrientos de México, no es nueva en el país. Quizás muchos estén tomando reales dimensiones de lo que sucede en este momento, pero las noticias sobre secuestros, violaciones, desapariciones y asesinatos por el narcotráfico y el crimen organizado vienen desde hace tiempo y en aumento.
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