El presidente ruso, Vladimir Putin, está preocupado por los repetidosataques de Israel en Siria, dijo, después de hablar durante una hora y media con el presidente Barack Obama la madrugada del martes, 29 de septiembre, en el marco de la Asamblea General de la ONU en Nueva York. Putin acordó que las preocupaciones de seguridad de Israel deben ser tenidas en cuenta en Siria, pero que estaba preocupado por los ataques periódicos de las FDI en posiciones del territorio asediado.
El domingo por la noche, el ejército israelí golpeó objetivos militares sirios con potentes cohetes de artillería Tamuz después de que dos cohetes sirios errantes aterrizaran en el Golán.
Fuentes militares de Debkafile informan que golpearon el puesto de mando de la artillería del ejército sirio de la 90ª Brigada, que está estacionada a las afueras de Quneitra. Fuentes sirias y libanesas dicen que el segundo comandante sirio resultó herido.
El mensaje que el presidente ruso emitió, inmediatamente después de su reunión con Obama, fue queMoscú no toleraría ataques israelíes en Siria, incluso en respuesta a un ataque.
Este comentario y los acontecimientos que condujeron a ellos plantean cuatro preguntas:
1. ¿Por qué Putin se toma la molestia de responder en persona a un incidente trivial como un intercambio transfronterizo de fuego en el Golán directamente después de sus altamente importantes conversaciones con Obama?
2. ¿Por qué estaba tan preocupado por este incidente? Se le ocurrió una semana después de que el presidente ruso y el primer ministro israelí, Binyamin Netanyahu habían acordado en Moscú establecer un mecanismo de coordinación para evitar enfrentamientos entre las FDI y las fuerzas rusas. Y en cualquier caso, no participaron las fuerzas rusas.
3. ¿Qué había detrás del comunicado emitido por el ministro de Defensa Moshe Yaalon de Israel después del incidente, en el que destacó con inusual énfasis que la tolerancia con las incursiones de cohetes sirios sobre el territorio soberano de Israel es cero?
4. Las dos declaraciones altamente cargadas estaban obviamente ocasionadas por mucho más que el errante fuego transfronterizo desde el lado sirio del Golán.
Fuentes militares y de inteligencia de Debkafile informan que las respuestas a estas interrogantes se encarnan en un individuo, el Brig. General Saeed Azadi, de la Guardia Revolucionaria iraní, cuya presencia y operaciones en Siria son un secreto celosamente guardado.
O al menos así era hasta que Netanyahu dejó escapar al gato fuera de la bolsa en su reunión con Putin la semana pasada en la residencia presidencial de Rusia fuera de Moscú. El primer ministro reveló su conocimiento de que el general Azadi había venido a sustituir al general Ali Allah Dadi, que murió el 18 de enero en un ataque aéreo israelí contra un convoy que transportaba guardias iraníes y comandantes de Hezbolá que viajan cerca de Quneitra. Estaban allí para inspeccionar un sitio para montar una campaña terrorista en Israel.
El ataque aéreo israelí mordisqueó este plan de raíz. Pero Irán y Hezbolá nunca se dieron por vencidos, y el general Azadi fue asignado para terminar de configurar la máquina de terror y conseguir que se pusiera en marcha y funcionando.
Hace una semana, Netanyahu dio aviso a Putin de que Israel no permitirá que esto suceda - incluso si esto significaba disponer de otro general iraní.
El líder ruso explicó que los ataques de Israel contra objetivos militares iraníes presentan un problema, ya que debilitan a Bashar Assad.
Tal como están las cosas, por lo tanto, Rusia e Israel están en curso hacia una colisión: Mientras que Israel considera el general Azadi como un adversario amenazante, Putin lo considera como parte del eje ruso-iraní en Siria y quiere que Israel mantenga sus manos fuera de él. Este punto es de una importancia tan fundamental para los planes del líder ruso para Siria, que hizo un gran asunto de ello en el más alto foro internacional. Casi como una secuela de su primera reunión con el presidente Obama en más de un año.
Estaba señalando enfáticamente que la disposición de los ejércitos rusos e israelíes para coordinar sus operaciones en Siria es inviable y que estaba perdiendo la paciencia con "problemas de seguridad" de Israel en la medida en que impidieron sus planes con Irán para Siria.
Fuentes militares agregan: El lanzamiento de cohetes sirios el viernes y el sábado no eran, de hecho, "errantes", como el portavoz de las FDI mantiene. Los cohetes fueron disparados por orden del iraní Brig. Azadi como una demostración de que la advertencia de Israel a Putin era una pérdida de tiempo y que se disponía a seguir adelante con su funcionamiento independientemente.
Netanyahu y Ya'alon transmitieron su mensaje de resistencia a esta operación dando instrucciones a las FDI de devolver el golpe con el cohete Tamuz, un sistema lo suficientemente potente como para dar a la otra una pausa y a Putin una complicación imprevista en su aventura siria.
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