El Ejército iraquí y las fuerzas de voluntarios han descubierto armamento y municiones, incluyendo misiles antitanque, en las posiciones y trincheras de los terroristas capturados durante las operaciones en la región de Faluya, en la provincia de Al Anbar, al oeste de Iraq.
Las fuerzas iraquíes hallaron un enorme stock de misiles TOW-2 avanzados en manos de los terroristas takfiris en la localidad de Al Karama, cerca de Faluya.
Los misiles, que parecen ser nuevos, fueron transferidos por el EI a Faluya para ser utilizados contra los tanques y blindados del Ejército iraquí.
Los responsables iraquíes han culpado a EEUU en diferentes ocasiones de suministrar armas y municiones al EI con el fin de prolongar el conflicto.
El pasado 10 de octubre, las fuerzas iraquíes descubrieron armas y municiones estadounidenses en poder de los terroristas del EI en la ciudad de Beiyi.
“Estas armas y municiones han sido arrojadas por aviones y helicópteros de EEUU y de otros países aliados suyos en áreas cercanas a Beiyi”, dijeron fuentes militares a Fars News.
En febrero, un responsable provincial iraquí criticó a los países occidentales y a sus aliados regionales por apoyar a los grupos takfiris en Iraq arrojando por vía aérea armas y alimentos a los terroristas del EI.
“Los aviones norteamericanos han arrojado armas a los terroristas del EI en áreas bajo el control del grupo e incluso en aquellas otras que han sido liberadas recientemente de la presencia del mismo para animar a los terroristas a volver a ellas”, dijo el coordinador de las Fuerzas de Movilización Popular, Yafar al Yaberi, a Fars News.
Él señaló que testigos de la provincia de Kirkuk relataron como los aviones norteamericanos habían arrojado varias cajas sospechosas en zonas dominadas por el EI en la provincia.
“Dos aviones de la coalición han sido vistos en la ciudad de Al Jas, en Diyala, arrojando cajas, lo que llevó a los terroristas takfiris a regresar a esta región, que había sido recientemente liberada del control del EI”, dijo Al Yaberi.
En febrero también, un legislador reveló que el Ejército iraquí había derribado dos aviones británicos que llevaban armas para el EI en la provincia de Al Anbar.
“El Comité de Defensas y Seguridad Nacional del Parlamento ha tenido acceso a las fotos de ambos aviones británicos, que se estrellaron mientras llevaban armas para el EI”, dijo el presidente del Comité, Hakim al Zameli, según un reportaje aparecido en el sitio web del Consejo Supremo Islámico de Iraq. Él señaló que el Parlamento iraquí ha pedido a Londres explicaciones a este respecto.
El legislador iraquí añadió que el gobierno de Bagdad recibe reportajes diarios procedentes de civiles y miembros de las fuerzas de seguridad de la provincia de Anbar que hablan de vuelos de aviones de la coalición liderada por EEUU que arrojan armas y suministros para el EI en las áreas dominadas por los terroristas. Él añadió que la explicación a estos hechos es que EEUU prefiere una situación caótica en Iraq y no quiere que la crisis del EI llegue a su fin.
La revista digital alemana Alles Shall und Rauch (ASuR), señaló también que durante la operación reciente en Al Karama, los militares iraquíes descubrieron un enorme hangar lleno de armas estadounidenses, incluyendo misiles TOW-2.
Y aunque el Pentágono afirmó que estas armas “desaparecieron el pasado año”, nadie, señala la revista, concede ningún crédito a tales alegaciones. Los medios iraquíes informaron que los misiles y las municiones en cuestión habían sido lanzados en paracaídas por los norteamericanos. Los portavoces del Ejército estadounidense negaron estas informaciones.
“Negadlo todo y haced como si fuerais inocentes. Nadie os creerá”, escribió la revista, que añade que el stock descubierto pone de manifiesto que EEUU ha suministrado al EI no sólo armas y municiones, sino también medicinas y alimentos.
“Washington y Occidente en general muestran cada día que están al lado de los terroristas del EI. ¿Un ejemplo? EEUU y sus aliados se han negado a apoyar la declaración del Consejo de Seguridad de la ONU en la que el ataque contra la Embajada de Rusia en Damasco era calificado de acto terrorista”, recuerda ASuR.
El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, comentó este comportamiento en los términos siguientes: “Es una lástima que nuestros colegas norteamericanos no se pongan al lado de aquellos que luchan contra el terrorismo y condenan los atentados terroristas. Esto implica un doble rasero y dos varas de medir. Tenemos, por desgracia, que constatarlo nuevamente”.
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