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martes, 9 de diciembre de 2014

EEUU insiste en causar daños económicos a funcionarios venezolanos bajo falsa acusación de violaciones a los DDHH


Un nuevo ataque imperial contra Venezuela se gestó este lunes en el Senado del Congreso de Estados Unidos, tras aprobar un proyecto de ley que propone causar un daño económico a funcionarios venezolanos, ya que busca suspender visas y congelar activos en territorio estadounidense pertenecientes a funcionarios venezolanos acusados de violar Derechos Humanos durante las protestas guarimberas que sacudieron al país en un intento de extrema oposición por derrocar al presidente Nicolás Maduro.
La iniciativa de ley impulsada dentro del Congreso norteamericano por senadores antichavistas fue adoptada por unanimidad apenas 48 horas después de la derrota que sufriera en segunda vuelta la demócrata por Luisiana Mary Landrieu, quien había presentado objeciones en agosto alegando su temor de que las sanciones pudieran provocar despidos en una planta de la petrolera venezolana Citgo ubicada en Luisiana.
La Cámara de Representantes aprobó en mayo una medida similar, y el Departamento de Estado suspendió en julio las visas a 24 funcionarios venezolanos, quienes fueron acusados sin argumentos serios comprobables de violar Derechos Humanos durante las protestas que dejaron 43 muertos a manos de la extrema oposición que busca derrocar a Maduro con apoyo estadounidense.
El gobierno estadounidense se pronunció el mes pasado por primera vez a favor de aplicar sanciones adicionales a funcionarios venezolanos, alegando que el diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición no ha dado frutos. Sin embargo el exceso injerencista de Obama está claramente parcializado con los sectores violentos de la extrema derecha, en tal caso el principal extremista impulsor de una agenda violenta mediante las guarimbas, Leopoldo López, quien ha sido detenido por la justicia venezolana como actor intelectual de hechos desestabilizadores que causaron la muerte de 43 personas pero vergonzosamente el Presidente de Estados Unidos una vez abogó por su liberación.
El Senado adoptó la iniciativa al día siguiente que Maduro anunciara públicamente que estudiaba las relaciones con Washington debido a informes que revelaban acciones de injerencia de la embajada estadounidense en el país. El proyecto de ley mantenía su vigencia durante el periodo legislativo en curso, que culminará a fines de diciembre.

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